Día de la mujer: mucho para hacer y mejorar si realmente queremos igualdad
Hoy es un día en el cuál se reivindican los derechos de las mujeres, pero la realidad muestra que nadie las representa ni las protege cómo se debe.
Este 8 de marzo se conmemora el “Día de la Mujer”, en el cuál se reivindican los derechos de todas las mujeres, apuntando a la sensibilización de la sociedad y a potenciar la igualdad de género.
Los resultados alcanzados hasta ahora no son lo satisfactorios que deberían ser, pero no debemos detenernos y seguir buscando la igualdad real y absoluta, ni mucho menos debemos detenernos en buscar la erradicación de la violencia de género, aspecto más importante en todo esto y sobre en el que se basa gran parte de esa desigualdad existente.
Cómo estamos en Cinco Saltos con respecto a la violencia de género y todos sus derivados?.
La realidad para quienes indagamos es este mal social nos muestra que estamos muy mal y hasta podía decir, cada vez peor.
Para exponer en este día de conmemoración y reivindicación cómo está la situación en nuestra ciudad, creo que es muy importante citar un caso que estoy siguiendo desde la época en la cual era conductor del programa “La Ventana” en Radio Cinco Saltos y luego en mi programa “TARDEO”, allá por el año 2020, en 2021 y que hace unos días, en 2024, volvió a estar en el límite de la vida de una mujer. Un caso testigo que desnuda todo.
Aclaro antes que, cómo este caso, hay muchísimos más que no salen a la luz pública por estar enterrados en el miedo y en la falta de respaldo y respuestas de todo lo que debería funcionar y no funciona.
Esta mujer a la que refiero, víctima de violencia de género y de intento de femicidio, siempre estuvo sola y aún con todas las denuncias hechas y los grupos de apoyo visitados en busca de algún tipo de respaldo que nunca tuvo. Sola.
Violentada, amenazada, perseguida, golpeada y con un intento de femicidio real sobre sus espaldas, ella tiene que seguir viviendo, “agradeciendo” que no la hayan matado, pero con la gran preocupación de que por el resto de su vida, se va a tener que cuidar, porque los violentos y femicidas nunca dejarán de ser tales. “Su” femicida está preso, pero, por cuánto tiempo?. Eso realmente alcanza?
Y digo su femicida porque lo es, aunque no haya podido matarla. Seguirá siendo por toda la vida de ésta mujer.
Su última experiencia hizo que por centímetros no la degollaran y si no fuera por la intervención de su salvador, hoy sería una víctima más por femicidio y seguramente le pondrían su nombre a una Plaza, cómo suelen hacer con las mujeres que ya no están más y que podrían estar. Nada más que eso, para luego seguir adelante esperando a que otra más caiga.
Debemos hacernos cargo de esto, porque desde hace mucho tiempo solo se marcha por las mujeres muertas, pero nunca por las que aún están con vida y con riesgo máximo de vida. No se marcha por las que están esperando su turno o las que están muertas en vida.
Esta mujer vio la muerte de cerca y llegó a una certeza: el sistema y los grupos que dicen ser de ayuda la dejaron sola y a la deriva. A merced del “macho violento” que la quiso degollar y que la continua amenazando.
Y es entendible que se sienta así, aunque es repudiable el por qué llegó a sentirse así. Es entendible porque no se hizo lo que se debía hacer para que hoy las mujeres víctimas de violencia de género tengan un entorno de seguridad y contención que las proteja y, sobre todo, para que realmente se sientan protegidas y lo estén.
El sistema no alcanza con enviar custodia policial a la casa de la víctima, ni tampoco alcanza con dictar orden de alejamiento, pautas de conducta y otras herramientas aplicadas en estos casos. No alcanza esto porque, cómo dije antes, los violentos y femicidas serán eso toda su vida. Y toda la vida las víctimas elegidas, no tendrán custodia.
Los grupos de apoyo que supuestamente se autoconvocaron para acompañar a las mujeres víctimas, cómo ser “Asamblea Feminista de Cinco saltos”, se convirtieron en grupos polítiqueros, en unidades básicas dónde seleccionan a quién ayudar o respaldar y que con el resto, miran para otro lado. Actúan según el “Pedigree” Político. Es un grupo selectivo del que la mayoría descree, porque a esta mujer de la que hablo, jamás la ayudaron o intentaron ayudarla o protegerla. No le dieron bola de ninguna manera.
Su caso fue público, su intento de femicidio fue confirmado, el violento encarcelado temporalmente y aun así, la dejaron sola.
Es acá dónde se ve la realidad que viven muchísimas mujeres de Cinco Saltos que no se animan a denunciar a los machos violentos porque no confían en que alguien las respalde, las cuide y las proteja de sus verdugos.
Nada les da la tranquilidad de denunciar ya que si lo hacen, deben volver a su casa, donde está el violento, a esperar que lo notifiquen sobre la denuncia, lo cual empeora la situación de la víctima y la pone más en riesgo. Ese es el sistema que tenemos y así funciona. Las dejan solas.
Ese es el sistema que tiene esta mujer que tomamos como ejemplo y del cual no se puede agarrar por ningún lado para sentirse tranquila.
Cambiar el sistema ya se debería haber hecho de antes, empezando por endurecer las penas para los intentos de femicidio, para los violentos denunciados que actúan sobre sus víctimas sin pudor y que solo reciben papeles, citaciones y visitas a una Salud Mental que se cae a pedazos y hasta comparten profesionales en psicología con sus propias víctimas.
Repito hasta el hartazgo: un violento lo será siempre, toda su vida. Lo único que podría hacer bien es controlar sus reacciones, pero sus intenciones seguirán para siempre.
Esta mujer no sabe qué será de su vida, en el sentido más literal y natural. No refiere a lo que hará de su vida, sino de si su vida no terminará cuándo el violento que la eligió vuelva a aparecer y se le vuelva a ocurrir asesinarla.
Alguien pensó en lo que debe ser vivir así?. Si llegaste hasta acá y lo pensaste, ahora súmale muchísimas mujeres que están igual pero sus casos se desconocen.
La conmemoración de éste día creo que no debe pasar solo por el día en sí, sino que mayormente debe pasar por el reclamo de un urgente cambio de leyes, adaptadas hacia los violentos, que protejan a las víctimas vivas y que le den justicia a las víctimas muertas. Que las leyes no sean tan permisivas con los violentos, sino que sean duras y ejemplares con ellos.
Que se apliquen y generen ejemplo, para a partir de ahí comenzar a generar conciencia en una sociedad violenta de por sí, que no trabaja en las futuras generaciones para que este mal social vaya disminuyendo.
Hoy es el día de la mujer y siempre debemos ser conscientes de la realidad, no olvidarnos mañana de todo lo que pasa y de lo que viven muchas mujeres para volver a recordarlo todo el 8 de marzo de 2025.
Quizás empezando por eso, empecemos a obtener otros resultados y sobre todo, empecemos a salvar las vidas a quienes nos dan la vida.